CALLE DE EL PRINCIPE

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  • čas přidán 3. 02. 2019
  • Calle de El Principe
    Por resolución tomada por la corporación municipal de Vigo el 21 de marzo de 1861, se crea la calle del Príncipe.
    Comenzaba así a existir la calle más conocida de la ciudad, aunque entonces aún pertenecía a un barrio extramuros, denominado O Salgueiral. Todavía Vigo estaba rodeado por las viejas murallas del siglo XVII. Treinta años antes de esta resolución, el Gobierno de la Regencia decidía construir una carretera que partiría de la Porta do Sol para enlazar con Castilla, la conocida como carretera Vigo-Villacastín.
    La presencia de aquella carretera originó la construcción de las primeras viviendas, cuyos propietarios fueron quienes llevaron en 1861 la petición de la creación de la calle a la corporación viguesa.
    Así pues, aquel día, el Ayuntamiento solicitaba al gobernador civil la declaración de calle perteneciente el trozo de carretera desde la puerta de las murallas, conocida como del Sol, hasta el sitio nombrado del Ramalillo, actual calle Colón.
    El nombre del Príncipe se dio a la calle en honor del hijo de la Reina Isabel II, el que años después sería Alfonso XII, que entonces solo tenía cuatro años de edad. Se compensaba así que nueve años antes, la corporación ponía el nombre de Plaza de la Princesa a la antigua plaza de la Pescadería en honor de Isabel de Borbón, La Chata, también hija de Isabel II. Así pues, Alfonso XII tiene dos calles en la ciudad, si le añadimos el paseo del olivo.
    Desde su creación, la calle fue ganándole el protagonismo a la vida social de la ciudad que en 1861 obtuvo la autorización para derribar sus murallas. Los comercios más elegantes y modernos abrieron en el Príncipe. También allí se trasladaron los servicios públicos más modernos, como el correo, el telégrafo, algunas de las consignatarias de mayor renombre y, a partir de 1881, la presencia del Palacio de Justicia con la cárcel y cuartelillo de la guardia municipal.
    En la década de los años veinte del siglo pasado, el Príncipe era la única calle de la ciudad que estaba asfaltada, y el tranvía pasaba por ella, situación que concluyó años después, dejándola como la primera calle peatonal que tuvo la ciudad.

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