Andrea CASARRUBIOS & Johannes BRAHMS Piano QUINTETS

22 de mayo a las 19.30h
Auditorio Eduardo del Pueyo, CSMA
GERMÁN GARCÍA, piano
JOSEP COLOMÉ, violín
ROBERTO BASTERRECHE, violín
ÍÑIGO BARTUREN, viola
ARANTZA GARCÍA, violonchelo
PROGRAMA
ANDREA CASARRUBIOS (1988*)
QUINTETO con piano (2023) *estreno en España
1. Abundance
2. Lullaby
3. Golden hour
4. Zasca!
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JOHANNES BRAHMS (1833-1897)
QUINTETO con piano opus 34 en Fa menor (1864)
* Allegro non troppo
* Andante, un poco adagio
* Scherzo: Allegro
* Finale: Poco sostenuto - Allegro non troppo - Presto, non troppo
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‪@andreacasarrubios‬
Andrea Casarrubios, Quinteto para piano y cuerdas (2023). Encargado por Chamber Music Monterey Bay en memoria de Terry Field, este quinteto evoca la notable variedad del mundo natural que rodea a Carmel-by-the-Sea, y, por extensión, los diferentes estados de nuestro propio mundo emocional - determinación,miedo, celebración, dolor - contra una quietud intuída y que lo abarca todo. El primer movimiento, Abundance, está inspirado en los florecientes ecosistemas que se encuentran a lo largo de la costa central de California. La música abraza la riqueza de la vida, expresada en melodías vibrantes, vitalidad rítmica y armonías exhuberantes, haciéndose eco del poder de las olas y los acantilados. El segundo movimiento ofrece un momento de tranquilidad y reflexión. Concebida como una canción de cuna, la música es tierna e íntima, pero es una canción de cuna tarareada para calmarse a sí mismo. El tercer movimiento, Golden Hour, captura la luz mágica y etérea de la costa del Pacífico. La música evoca los tonos dorados que bañan el paisaje durante esos momentos fugaces de la puesta de sol. El último movimiento de celebración añade un toque animado al quinteto. Inspirado por el sonido de un abanico que se abre en un día caluroso, Zasca es la palabra para describir ese gesto rápido, y la música está infundida con energía rítmica mientras el piano y las cuerdas se involucran en un diálogo emocionante que captura la
emoción de un baile de verano. Este movimiento también es un intento de encontrar algo de ligereza en la batalla en curso con interminables olas de calor.
Johannes Brahms, Quinteto con Piano. Originalmente concebido como un quinteto de cuerdas con dos violonchelos, pronto se transformó en una sonata para dos pianos antes de su transformación final en este quinteto de piano. Después de haber ensayado la versión del quinteto de cuerdas durante varios meses, el colega de Brahms, el violinista Joseph Joachim, le escribió el 15 de abril de 1863: "No estoy dispuesto a dejar que el quinteto pase de mis manos sin habértelo tocado a ti...
No deseo dogmatizar los detalles de una obra que en cada línea muestra alguna prueba de fuerza abrumadora. Pero lo que falta es, en una palabra, el encanto.
Después de un tiempo, al escuchar el trabajo en voz baja, creo que sentirás lo mismo que yo al respecto".
Al recibir esta crítica, Brahms se puso a trabajar para corregir los pasajes a los que Joaquín se había referido específicamente. Después de una audiencia privada, Brahms todavía no estaba satisfecho. El problema estaba en la escritura de la cuerda. Las demandas de Brahms sobre los instrumentos superaron su comprensión de sus capacidades. Habiendo reconocido esto, trató de volver a anotar la música. La primera metamorfosis estaba a punto de comenzar.
En febrero de 1864, Brahms había transformado el quinteto de cuerdas en una sonata para dos pianos. Una vez más, se sintió decepcionado después de interpretarlo del manuscrito con el pianista Carl Tausig. Sin embargo, Clara Schumann, que había estudiado la versión original del quinteto de cuerdas, y a quien Brahms también envió la nueva versión para dos pianos, tuvo una versión diferente. Ella escribió a Brahms el 22 de julio de 1864: "La obra es espléndida, pero no se puede llamar sonata. Más bien es una obra tan llena de ideas que requiere una orquesta para su interpretación. Estas ideas están en su mayor parte perdidas en el piano... La primera vez que probé el trabajo tuve la sensación de que era un arreglo... ¡Así que, por favor, remodélalo una vez más!"
La segunda transformación se produjo por consejo de Hermann Levi para formar un quinteto de piano a partir de las cenizas de la sonata. Brahms cumplió enviando la nueva manifestación de la partitura a Levi, quien respondió el 5 de noviembre de 1865: "El quinteto es hermoso más allá de las palabras. Cualquiera que no lo conociera en sus formas anteriores de quinteto de cuerda y sonata de dos pianos nunca creería que no fue originalmente pensada y diseñada para la actual combinación de instrumentos... Has convertido una obra monótona para dos pianos en una cosa de gran belleza, una obra maestra de la música de cámara..."
Brahms fue capaz de crear una obra híbrida a partir de las versiones originales de quinteto de cuerda y dos pianos, casi como un compromiso entre él y sus confidentes artísticos.

[@jamartingo04]

Artistazos!! Bravo!!

[@CarmenGarciaAlvarez-zi4md]

Bravo¡¡Sois maravillosos!!