Evaluación del estado de hidratación en veterinaria | CIM Formación

El veterinario Luis Miguel Muñoz Jordán y la auxiliar veterinaria Yolanda Barrio De Gea nos explican cómo evaluar el estado de hidratación de los animales.
Para ello existen técnicas distintas, una de ellas es a través de la historia clínica, analizando los antecedentes y los episodios que podrían alterar o modificar el estado de hidratación.
Otro método es la exploración física, a través de la cual hay que tener en cuenta el tiempo de retorno capilar, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria, el brillo de las mucosas y la elasticidad de la piel.
En este último caso es muy útil observar si un pliegue cutáneo se libera o no rápidamente: si lo hace, significa que el estado de deshidratación está por debajo del 4%, lo que lo hace prácticamente indetectable.
A medida que el grado de deshidratación va aumentando, el pliegue cutáneo tarda más tiempo en bajar o incluso no baja.
Cuando se analizan las mucosas, hay que comprobar que el retorno capilar sea menor o igual a los dos segundos. En caso contrario habría que aplicar sueros de manera urgente.
Cómo alternativa, se puede recurrir al método analítico. En este caso se efectúan análisis de sangre que nos permiten evaluar el hematocrito, o sea la concentración de células en el líquido. También se puede determinar la hidratación examinando la densidad de orina y las proteínas totales.
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