Osmar, menos mal qué no me tocó probar la ya famosa papita picosa. De hacerlo, no me daría tiempo a vomitar, porque seguro, no sobreviviera antes a ello. Y es que no estoy acostumbrado a los picantes. Ustedes , se divertirían conmigo, al verme reaccionando al tremendo picor y reflejado de forma clarificafora en mi cara. Un abrazo amigo y cuídate mucho.
Osmar, menos mal qué no me tocó probar la ya famosa papita picosa. De hacerlo, no me daría tiempo a vomitar, porque seguro, no sobreviviera antes a ello. Y es que no estoy acostumbrado a los picantes. Ustedes , se divertirían conmigo, al verme reaccionando al tremendo picor y reflejado de forma clarificafora en mi cara. Un abrazo amigo y cuídate mucho.