Qué linda que se ve mi Manizales esparcida en las montañas, tan admirable y frágil. Ojalá los manizaleños podamos aprender algún día a quererla como se debe: admirarla y disfrutarla en los buenos tiempos y apoyarla, no acabarla a chismes y quejas, en los tiempos de adversidad!
Qué linda que se ve mi Manizales esparcida en las montañas, tan admirable y frágil. Ojalá los manizaleños podamos aprender algún día a quererla como se debe: admirarla y disfrutarla en los buenos tiempos y apoyarla, no acabarla a chismes y quejas, en los tiempos de adversidad!