Pablo Cedrón: "El actor no tiene que querer ser más importante que el objeto que persigue"

Pablo Cedrón es el protagonista de Boca de pozo, el filme de Simón Franco que recientemente llegó a la cartelera cinematográfica que recrea las duras condiciones de vida de los trabajadores del petroleo y que muestra al actor en su mejor forma, encarnando a un personaje preso de las contradicciones del capitalismo, profundamente insatisfecho, triste.
Con una larga carrera en teatro, cine y televisión, Cedrón demostró ser efectivo en un amplio registro que va desde sus participaciones en "Cha cha cha", como el recordado sexólogo paraguayo Nélson Gómez, una legendaria publicidad con Araceli González, como protagonista en "Felicidades" de Lucho Bender o en producciones como "Campeones", "Sin Código" o la reciente "Farsantes".
Y es uno de esos artistas que no invierten su tiempo en estar donde se supone que deben estar para mantener la atención y que por lo tanto y a diferencia de la mayoría de sus colegas, no le produce angustia los períodos en que no suena el teléfono para convocarlo a algún trabajo.
"En los momentos que no tengo laburo como actor trabajo como carpintero o en herrería", cuenta Pablo Cedrón. Y cuando se le pregunta cuál es la reacción de algún ocasional cliente que descubre que es actor, contesta con ironía "yo supongo que debe pensar que caí bien bajo".
Lo cierto es que Cedrón, que comenzó su formación con Rudi Chernicof y siguió con diferentes maestros como Alejandra Boero, Agustín Alesso y Ricardo Bartis, también tuvo un rico y ecléctico camino laboral que incluye pintor de brocha gorda, cocinero, como peón de albañil, guarda parques en el Sur, como operario en una fábrica de matracas y peón de limpieza.
"El actor no tiene que querer ser más importante que el objeto que persigue, que es el personaje", afirma Cedrón sobre su oficio, una entrega que junto a su manera de relacionarse con el trabajo manual y claro, su capacidad interpretativa, hicieron que el director Simón Franco haya pensado en él desde el comienzo del proyecto, cuando "Boca de pozo" apenas empezaba a delinearse.
Satisfecho con la película y apurando una entrega de herrería en su casa-taller de San Telmo, Cedrón comenzó a ensayar una obra que subirá a escena en breve en el Teatro Chacarerean, proyecta un espectáculo donde contará historias y tocará la trompeta y sigue buscando financiación para "Romanos", donde además de actuar es responsable del guión y la dirección. Sin esperar que el teléfono suene.
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