Presentación del libro Prisiones contemporáneas Prácticas, disputas y desafíos en el siglo XXI

La cárcel, en la presente publicación, será considerada como expresión de un orden social frágil en donde los sentidos, criterios morales, códigos, e incluso lenguajes específicos se confrontan y donde los detenidos disponen de niveles de autonomía menguados, en gran medida, resultado de prácticas punitivas que abarcan a toda la sociedad. Ante ello, la educación universitaria en dichos espacios no solo se prodiga en una heterogénea cantidad de propuestas, sino que asume para sí el deber de dar cuenta del significado de dichas experiencias y de los alcances que, en términos políticos, tienen. Lo señalado se expresa a través de múltiples iniciativas y situaciones, las cuales están guiadas u orientadas no solo por un genuino interés formativo y pedagógico sino también por prácticas y experiencias de investigación dentro de las cuales el análisis de las prácticas educativas representa sólo alguna de ellas. Sin embargo, ese precario e informal orden, construido a expensas de lo que la cárcel representa o simboliza, se ve amenazado no solo por la incapacidad de la prisión para regular ámbitos confinados sino también porque de ningún modo el carácter represivo de sus significados y alcances podrá desplazar o reemplazar un conjunto de relaciones que promueven la solidaridad, la tolerancia y el sentirse iguales. La cárcel, del modo que se presenta en esta publicación, asume un carácter que debe ser cuanto menos cuestionado.