Escritubre 19: Usar tu vida y la de otros para escribir
Vložit
- čas přidán 29. 08. 2024
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Reto: inventar una historia en la que algo terrible o algo maravilloso sucede a causa de que un texto es revelado... ¡El poder de las palabras!
en este mismo comentario?
@@Ookami2008 Si, ¿Por qué no?
Gracias Lorena por tus sugerencias, nosotros ya tenemos cierto concepto de estas situaciones, pero nos agrada mucho tu fprma didactiva de divulgar estos asuntos para los noveles escritores (como nosotros) aunque no nos consideramos tan noveles .... muchos saludos y bendiciones para ti y toda tu gran comunidad
Vendí mi vida por un apartamento y no puedo estar más arrepentido. Resulta que los chismes sobre mis pequeños delitos (copiar en los exámenes fin de carrera, robar un libro en una librería, comer en un restaurante e irme sin pagar...) se propagaron hasta que la Fiscalía decidió abrirme una causa penal de oficio. Ahora comparto celda con "Taladro".
VLV. 😂
Que buen video 😎👊 Me encantan los vídeos de "escrituber".
Muy bien explicado. Y además muy necesario saber precisamente eso, que uno es responsable de cruzar la línea o no.
Todo lo que pones es interesante y de gran ayuda . Muchas gracias.
Espero que os guste esta. Es estilo creepypasta, porque últimamente me ha dado por leer un montón de estos.
SE NECESITA PERSONAL
El texto era muy escueto, cuatro frases y una dirección impresas en una simple hoja de papel tamaño cuartilla. El barrio había amanecido lleno de ellas, en buzones, en los limpiaparabrisas de los coches, y fijadas con un brochazo de cola a muros y farolas.
“Se necesita personal”, empezaba, con letras más grandes que el resto.
El trabajo que ofertaban no me resultaba especialmente atractivo, pero trabajo era después de todo. La dirección era la de un antiguo taller abandonado al final de la calle que había sido reformado poco antes, aunque no podía concretar cuando. Realmente, paso por delante del taller casi a diario, y no seria capaz de decir en que momento lo vi diferente, aunque de lo que estoy seguro, es de que en ningún momento vi gente trabajando en él, arreglando el interior o pintando la fachada. Ahora tenia un aspecto muy distinto. Más nuevo, pero también más… no sabría como decirlo. Más sombrío. Parecía un bunker, con ventanas pequeñas y estrechas, y una puerta metálica que recordaba un poco a la de una caja fuerte. Si lo que pretendían era llamar la atención para poner de moda el local rápidamente, sin duda lo habían conseguido.
“Preferentemente de 15 a 35 años y buena salud, pero se considerará a todo tipo de candidatos”
“No se necesita experiencia previa ni referencias” indicaba antes de terminar, con la dirección. Desde luego lo ponían muy fácil, y cuando llegué al local, no me extrañó verlo lleno. La curiosa puerta estaba abierta, y daba a una sala cuadrada de paredes blancas, sin decoración de ninguna clase. En la sala había otras tres puertas como la que daba a la calle. Éramos unos cincuenta, calculando por lo bajo. Muchos tenían una hoja en la mano como la que llevaba yo. No había ningún lugar en el que sentarse, así que permanecí de pie unos minutos hasta que las otras tres puertas se abrieron a la vez.
De una de ellas salió un individuo alto y espigado, con lo que parecía una bata de médico, que nos examinó por encima con aire crítico. La gente comenzó a murmurar, preguntándose unos a otros si sabían algo de un examen médico para el trabajo. Algunos consultaron la hoja que ya debían haberse leído varias veces, en busca de alguna referencia a ello que en el fondo sabían que no iban a encontrar.
El hombre se acercó a quien le quedaba más a mano, una chica guapilla y regordeta de unos veinte años. La observó durante un par de segundos y a continuación, sonriendo, le indicó:
- Aceptada. Pase por allí, por favor- y le indicó una de las puertas.
Fue haciendo lo mismo con el resto, rechazando a muy pocos. Les dijo que se fueran a los cuatro drogatas del barrio, a un hombre que ya rozaba la ancianidad, y a un par más que no llegué a ver bien, pero la mayoría eran enviados a una u otra puerta. Me pareció que aquellos con algún grado de sobrepeso eran enviado a una, y los que parecían tener más de cuarenta años a otra. El resto, eran enviados por la tercera.
La cuarta puerta, la que daba a la calle, seguía abierta porque todavía entraba alguien de vez en cuando para unirse a la selección. Pero aquello no me gustaba. Estaban eligiendo a demasiada gente para lo que se suponía que iba a ser aquel negocio, y había algo decididamente raro en el ambiente. No era el único que lo notaba, porque vi como algunos se echaban para atrás para quedarse rezagados, mientras decidían si irse o quedarse. Yo no me lo pensé más. Aquello me daba cada vez peor pálpito, y he aprendido a hacer caso de las corazonadas, así que simplemente salí del local. Y suerte que seguí mi instinto, porque poco después de salir, la puerta de la calle se cerró por si sola. Quizá ya tenían personal más que suficiente.
Me quedé mirando la puerta cerrada, pensando si no había hecho el tonto y desperdiciado una buena oportunidad de trabajo. Quizá aún estaba a tiempo de que me admitieran. Aún dudaba sobre si llamar a la puerta o volver a casa cuando el sonido empezó. Era un estruendo que llegaba del interior del local. Un ruido terrible, como de una gran rueda de molino girando lentamente, mezclado con el de una trituradora, y con gritos. Docenas de gargantas gritando a la vez. Gritos de dolor, pero también de pánico, y voces rogando piedad o clamando auxilio. Duró apenas un par de minutos, pero se me hicieron eternos, y me dejaron clavado en el sitio, incapaz de reaccionar.
Cuando el estruendo terminó, pocos segundos después de que las últimas voces se apagaran, eche a correr. Corrí sin pensar a donde iba, tratando solo de alejarme de allí, pero mis pies, quizá de nuevo por instinto, me llevaron hacia la comisaría del barrio.
Una hora después, estaba de vuelta en el local acompañado por varios agentes. La puerta exterior estaba ahora entornada, y el local abandonado, pero no vacío. Se encontraron gruesos cables de instalación reciente surgiendo de las paredes, como dispuestos para suministrar corriente a grandes máquinas que no aparecieron por ningún lado. En una especie de almacén, las marcas en el polvo del suelo evidenciaron la retirada de enormes contenedores, y el arrastrar de pies. Lo peor fue que en todas las salas, excepto en dicho almacén y en la que daba a la calle, se encontraron montones de ropa destrozada, hecha girones y ensangrentada, y pilas de huesos astillados. Todo esto me libró de que me tomaran por loco, pero también me convirtió en blanco de varias semanas de interrogatorios tanto de policías como de psicólogos, incluso por parte de un par de tipos trajeados de negro que en ningún momento llegaron a identificarse.
Y luego está el asunto de los papeles. Las cuartillas de publicidad, cuyo texto se fue borrando aceleradamente hasta desaparecer por completo, a pesar de los intentos de conservar alguna intacta. Solo han quedado las fotos que le hicieron a la que yo llevaba en el bolsillo aquel día, en la que, a pesar de haber desaparecido ya la mayor parte del texto, aun podía leerse:
Se necesita personal.
Para preparar hamburguesas.
Preferentemente de 15 a 35 años y buena sa
Wow. Muy bueno, me encantó
¡Excelente, me gustó mucho! Ahora me pregunto si esas hamburguesas serían para clientes exclusivos o si las venderían a un público inocente, jeje. En todo caso, me alegro de ser vegetariano. :D
Escucho tus videos para distraerme mientras hago limpieza :3 💙💙
Saludooos
Gracias por la motivación y la guía
Tomemos mi frustración para hacer una pequeña historia xD
Lo malo del celular es que no me deja poner guiones largos u.u
-Explícame, ¿qué es esto? - me preguntó mi madre en cuanto cruce la puerta como si por el simple hecho de que lo señalará supiera de que se trata.
Me acerqué para descubrir que mi madre sostenía unos boletos de avión. Debí imaginarlo cuando la ve con expresión seria sentada cruzada de brazos ante la mesa de la cocina.
-¿Estuviste esculcando mis cosas? - pregunté molesta.
-Responde mi pregunta - dijo alto al levantarse.
-¿Qué más pueden ser? Son los boletos para mi viaje con Julián
-¡Te dije claramente que no tenías permiso de ir! Hija, por Dios, ¿qué pensará la gente de que pases una noche a solas con tu novio y sin estar comprometidos o casados? - lo dijo como si fuera lo peor que le puede pasar a una mujer.
-Por favor, mamá. Estamos en pleno siglo veintiuno, ahora las parejas viajan para pasar el rato y disfrutar, además ¡ya tengo 25! - le recordé lo obvio.
-No importa, como mujer debes de reservarte hasta el matrimonio.
-Si supieras que perdí mi virginidad desde los 17 - dije para mis adentros y me cruce de brazos. - Madre, es momento de que tanto tu como yo, vayamos agarrando la onda de que soy un adulto - traté de decir con amabilidad.
-Pero vives bajo mi techo y bajo mis reglas
-¿Entonces qué? ¿Quieres que me vaya de la casa? - ya estaba perdiendo la paciencia
-No, claro que no, solo te pido obediencia -ahora ella hablo con más tranquilidad.
-Soy obediente, pero no voy a seguir tus ideas de antaño, tengo derecho a tomar mis propias decisiones.
Vi como mi madre torció la boca y se le frunció el ceño.
-¡Ya te dije que no vas a ir! - mi madre rompió a la mitad los boletos y a mi se me acabó la paciencia.
-Esta bien, si eso quieres...
Me fui azotando la puerta sin hacer caso a los gritos de mi madre.
Me subí al carro y me dirigí a la casa de mi novio, llorando de coraje.
Me sentía enojada y muy frustrada, y la música en el radio no ayudaba a mejorar mi ánimo.
El auto sentía mi furia, y se resistía a obedecerme. Sonó varias veces o se jaloneó un poco cuando cometía algún error al meter el cambio y eso solo me enojó más.
Las lágrimas se fueron acumulando a tal punto que mi vista se tornó borrosa. Me limpié las lágrimas con el dorso de la mano, para ver con claridad que me había saltado una luz roja, miré a mi derecha para ver ese carro azul a punto de colisionar conmigo.
-Al menos así ya no podré decepcionarte...
Triste desenlace. :(
@@krugos1978 aproveché que el reto era que sucediera algo terrible 😅😓
Excelente, Lorena!
Buen día. Quien escribe con regularidad de seguro ha tomado alguna vez un elemento real de su propia vida o de gente cercana para una obra. Debe haber quien escriba casi sobre una vida entera, pero creo que por lo general se usan fragmentos, situaciones específicas como "material". Por eso luego sucede que hay gente que escribe bajo pseudonimo. Buena reflexión.
Mui interesante. Gracias
Yo uso experiencias personales para mis relatos en más de una ocasión. Pero nunca los transcribo al pie de la letra. Pues son los llamados "hecho reales" que pasan a ser ficción en el momento de ser redactados. A día de hoy me encuentro en un proceso de investigación, redactando una novela corta "inspirada" en una experiencia de mi vida personal, pero a partir de ahí ya todo es ficción. Por ejemplo, el inglés Clive Barker se inspiró en una anecdota de su vida personal, cuando volviendo en el metro de la casa de un amigo, se quedó dormido en el vagón y despertó en un entorno vacío y oscuro, antes de que el revisor qué supervisaba los vagones le llamara la atención a altas horas de la noche. La anécdota le sirvió para escribir su magistral relato "El tren de la carne de medianoche", incluido en su antología de los "Libros sangrientos".
Yo también lo hago. Casi todo lo que escribo es vivencia personal en entre un 10 y un 30%, y el resto inventado.
Ella había ido a la biblioteca a pedir un libro para sus vacaciones. Estaría por unas semanas en su pequeño departamento disfrutando de su soledad, leería un par de libros para disfrutar y llenarse de conocimiento. En las estanterías veía cada título, cada cubierta, cada página. Unas hojeadas rápidas para saber su contenido. Agarro 5 libros en total de diferente contenido, camino en esa pila hasta la recepción para pedir prestado los libros. Al revisarlos la joven penso en fumar un cigarrillo mientras esperaba, pero la empleada le cuestionó algo inusual.
-¿Ese libro también lo va a pedir usted?
-¿De qué habla?
La empleada amablemente le señaló un libro de tapadura negro sin nombre. La joven lo miro fijamente.
-Yo sé lo recomiendo.
Una mirada afilada se presento por un momento en la empleada que no logro ver la joven porque aún sus ojos que quedaron inmersos en ese libro extraño.
-Esta bien, un libro más no importa mucho.
-Como usted diga.
La empleada metio los libros en una bolsa de asas y se lo dio con una sonrisa. La joven solo agarro indiferente la bolsa, seguía fumando, dando si tarjeta de la biblioteca y se fue. Una indiferencia total como todos los demás. Camino hasta su pequeño departamento, la joven preparo el lugar para su maratón de lectura. Vistió de ropa cómoda, preparo comida sencilla para las próximas semanas hasta las botellas de agua las había arreglado y se acomodo en el suelo con una cobija. Estaba dispuesta a leer algo por la noche. Agarro la bolsa de los libros, primero agarro ese libro extraño e inspeccionarlo. Tenía la costrumbre de observar a detalle tanto exterior y del contenido, pero con este no lo hizo. Sintió la tapa dura de cuero negro del libro, era uniforme pero con alguna que otra arruga leve, no había un grabado del nombre del libro ni un resumen del contenido.
-Que extraño.
Después procedió a leer, no había otra alternativa más que ir leyendo esas palabras. No obstante, al pasar las yemas de sus dedos por esas páginas, estaban en blanco. Esto no era posible. La desesperación la abrumo que paso cada página rápido hasta ir al final, no había nada escrito. El dolor apareció, tambaleo y la joven se desmayo. Solo podía escuchar su propia voz leyendo en voz alta algo enigmático, terrible y maravilloso hasta veía unas cuantas imágenes como representación de esa historia. De ese libro desconocido. Era una historia desgarradora, cruel, mortifera, hermosa, maravillosa, cálida y abrumadora. Despertó alarmada, estaba cansada y adolorida. Observó su celular, sábado por la tarde, se había dormido por 5 días. Sin embargo, no quería levantarse y solo sollozo en silencio. Se encogió su cuerpo y se quedo inmóvil durante unas horas, después se levantó desganada y comió. Las lágrimas se apoderaron de nuevo, era algo simple pero delicioso. Le dolió. Se culpaba por existir. Ahora sabía la verdad, el origen de la humanidad. Sus ojos se tornaron rojos por un momento que cambió a ese color castaño oscuro con el que había nacido. Debía de tomar una ducha eso fue lo que se dijo, mientras trababa de olvidar. Que desgracia y maldita era la humanidad. En la ducha noto que su cuerpo empezo a aparecer algo oscuro en su piel como un especie de tatuaje. Era quebradizo, monótono, bello como pequeños diamantes y estrellas, hasta aparecía como una enredadera de rosas. La joven sabía lo que le pasaba. Había sido elegida.
Me encantan tus videos, la verdad que me sirven muchísimo tus consejos y me gustaría pedirte si podés hacer uno con consejos o algo similar con respecto a novelas históricas! Muchas gracias y saludos desde Argentina 🇦🇷
Hola, Lorena. Gracias, realmente me están sirviendo tus consejos. Me aclaran muchas dudas.
Se que no tiene que ver con el tema del vídeo, pero acabo de encontrar este canal y déjame decirte que a mí no me gustan para nada las historias de vampiros, pero tús libros de Gothic Doll son una joya, los ameeee, sobretodo el primero que tenía las imágenes de la muñeca, siempre la quise hacer.
Saludos !!!!
Reto 19:
Me sorprendió lo mucho cómo un amor pudo convertirse simplemente en odio. Todo comenzó hace 2 años, no hablaba con muchas personas y ella tampoco, vaya que me encantó su forma de ser, en serio que sí, pero me aterró mucho lo que después de un tiempo saliendo viví. Conocía hasta el más mínimo rincón de información sobre mí, entonces, sentía que no tenía escapatoria. Con el paso del tiempo, no evitaba sentirme nervioso con cada salida y con cada plática. Decidí escribir un diario en dónde desahogarme de todo lo ocurrido y me las ingenié para esconderlo donde yo solamente pudiera verlo, me la pasaba horas en la casa haciendo los quehaceres del hogar y no trabajaba porque ella me había obligado a renunciar, poco a poco, las salidas con mis amigos eran menos posibles porque siempre me estaba vigilando con alguna de sus amigas. Irme a vivir con ella fue de lo peor, en éstos momentos lo aprendía más pues, se había convertido en mi mayor pesadilla, a duras penas podía agarrar el celular porque ella me lo revisaba al instante, tenía que avisarle acerca de todo o sino en las noches venía lo peor, los moretones empezaron a aparecer y con cada uno el dolor en mi cuerpo aumentaba, me sentía... su esclavo. Por suerte, una amiga mía vino a verme, hablamos un poco pero con discreción, me recomendó que pensara con cuidado las cosas y que ella estaría ahí para ayudarme; su visita, aunque corta, me brindó tranquilidad y claridad, esa noche me iría de la casa y... Ahora estoy tirado en el suelo, pensando en cómo llegué a esta situación, ella descubrió el escondite de mi diario mientras yo preparaba la cena hasta que sentí un dolor indescriptible, su última opción para que no la dejara... fue matarme...
Hice el intento de participar al fin,
Arrugó el papel y lo dejó tirado sobre el escritorio. El olor a frutos y florales aturdían sus sentidos.
-Ojalá hubiera vivido en la ignorancia-musito antes de beber la últimas gotas de la botella.
Frotó su lengua sobre sus labios y saboreó el lúpulo. Ya no recordaba hace cuanto tiempo fue la última vez que comió. Lo único de lo que estaba seguro, es que fue antes de abrir la carta escrita por su esposa, un desayuno sencillo, de pan duro y cerveza, porque siempre era lo mismo. El resto de sus ganancias eran para pagar la educación de Willian.
Su querido pequeño, tenía los ojos castaños de su madre. Aquello era lo único que le mantuvo en pie cuando aquella fiebre primaveral se la arrebató.
La vida en la ciudad no era sencilla, pero daba las oportunidades que nunca encontraría en el campo. Aquí podía darle algo que nunca podría en el campo a su pequeño, educación. Desde pequeño su padre le dijo, la educación es lo único que le sacará de la pobreza, el conocimiento es el único poder que importa.
-Ojalá no supiera leer y escribir-susurró para sí mismo y un olor distinto a la cerveza se propagaba con mayor intensidad.
Su esposa era una noble que no aceptó un matrimonio arreglado y huyo con su jardinero. Un jardinero que le prometió una vida sencilla, pero llena de amor.
Y así fue hasta el final. Se maldijo a sí mismo, por no tener el dinero para pagarle un medico, pero no tenía tiempo para la autocompasión. Tenía un hijo que era el fruto de su amor y lo único que quedaba de su esposa.
Su pequeño de mejillas pecosas y cabellos morenos. Tan risueño y cariñoso, siempre siguiéndole y llamándole papá con distintas tonalidades e incluso siguiendo ritmo de canciones. Siempre bromeaba que debería crecer para ser un famoso cantante de ópera.
Volvió a observar la carta y la estiró, asiendo legibles la temblorosa escritura de su amada esposa. Escribió está carta en sus últimos días, en donde apenas mantenía la conciencias ante la fiebre. Falleció antes que pudiera enviarla y quedó entre sus pertenencias. La encontró al buscar entre ellas alguna joya que se hubiera traído antes de huir, para venderla y comprarle unos nuevos pantalones a Willian.
La carta era para su amante, un famoso empresario y filántropo.
Quería que la salvara y sacara de este agujero, a ella y a su hijo. Le aseguraba que era suyo, que compartía las mismas pecas y cabellos morenos.
-Yo también tengo el cabello moreno-murmuró y el olor a cadáver se hacía insoportable.
Todo fue difuso, recobró sus sentidos cuando el cuello de su hijo había sido marcado por sus manos y el calor de su cuerpo había desaparecido.
Y ahí seguía, su pequeño Willian durmiendo arropado en la cama que compartían en aquel pequeño departamento.
Ya no tendría que esperar más. Podía sentir como sus tripas se devoraban a sí misma, su cuerpo ya estaba en las últimas.
Una pequeña y leve sonrisa se dibujó en su rostro antes de dejar caer la carta por última vez.
Muy buenos temas, Lorena. Estos videos están increíbles!! 😁
¡Qué bueno que sean útiles!
Publiqué un libro, nada tiene, ni tenía, que ver con cierto ex novio... Pero el se sintió aludido y casi literalmente enloqueció, ni siquiera escribí sobre él, pero ver mi nombre y leer unas pocas lineas lo hizo sentir aludido : /
Espero sea de su agrado
Punto de vista
Nuevamente lo había encontrado, aquel diario que lo seguía sin importar a donde fuera. Cómo las otras veces una nueva página había sido escrita, relatando la muerte de una persona de manera grotesca y detallada. La sangre manando de las heridas, el detalle de los gritos que cesaban conforme los latidos de esa persona disminuían. Cómo su alma prácticamente era visible mientras dejaba su cuerpo.
No supo cómo reaccionar, en esta oportunidad había algo muy familiar.
Su mente quebrantada por el temor se despejaba conforme las sirenas de la policía se acercaban, podía sentir la voz y el dolor de su vecina que había sido desmembrada por sus manos y ahora se encontraba en su refrigerador con la mirada perdida. Ahora sólo faltaría agregar la última página de su diario en donde relataria su propia muerte.
Querido diario, si supieras lo que tengo hoy en el refrigerador. :D
@@krugos1978 jajaja basicamente por eso se titula así, dependiendo tu punto de vista cambia el género
RETO 19
Usar tu vida y la de otros para escribir.
EL DESTINO DE LOS AMADOS PROFETAS IGNORADOS.
Y aquí estoy, después de tanto drama, de tantos sueños, de tanto esfuerzo, comiendo la basura de los perros. El único reflejo humano que destella mi cuerpo en los charcos, no está en mi vacía mirada carente de esperanza, de idealismos, No. Mi reflejo está en mi sombra. Y mi sombra no dice nada. Hasta mi sombra es más humana. La gente evita verme y desvía sus ojos hacia la sombra en la pared.
No los culpo. Yo sabía lo que estaba haciendo cuando decidí dar a conocer esa información sobre el comercio mundial y como estamos inmersos en el fango porque nos es cómodo vivir de las sobras y su acceso a bajo costo. Vivimos de gangas que nos han costado la libertad por cientos de años.
Lo que antes llamaba persona, ahora es un débil despojo con el que no quieren chocarse. Después de intentar liberarlos con mis revelaciones impresas en mis libros, y haber alcanzado un gran tiraje a nivel nacional, mi voz fue aplastada por el poder de poderes: El de los medios de difamación.
Antes de dar a conocer todos los actos, todas las farsas de quienes me han acorralado, yo sabía lo que podía pasar. Pero nunca imaginé lo que iba a perder. Este mundo vive en una ficción no porque esto sea un videojuego, sino porque no existe libertad sino lo que les es permitido amoldar para que sigan consumiendo.
Quizá si me hubieran dicho que terminaría bajo las alcantarillas, conviviendo con ratas, cucarachas y una hedor a vomito pudriéndose, no lo creería. Pero si me preguntaran hoy, si decir la verdad, valió la pena, si me arrepiento de haberlo intentado, de sacar a la luz el mundo invisible del que todos se quejan y en el que todos se complacen contradictoriamente, diría que este es el momento para volver a las calles. Volver a escribir. Volver a intentarlo con una experiencia letal.
Muy bueno Barahas, es una fiel descripción de lo que podría pasarle a un literato investigador, si se pusiese a jugar con la cola del león.
Me encantó. Preciso, sentido, y, en lugar de predicar un mensaje fijado, más bien acompaña hacia cierta dirección, desafía a contemplar una perspectiva diferente de las cosas.
Por cierto, evidentemente los medios lo arruinarían. A Jordan Peterson intentaron arruinarlo cuando recién ganaba fama y estuvo opinando sobre los movimientos de corrección política.
@@elestrabicodebellavista Probablemente. Pero como dice un sabio, "el que se aflige se afloja". Así que esperemos que nuestro valiente escritor haya aprendido algunos trucos al León.
@@Sunnako ah, si. Muy buen orador. Ya casi no se escucha. A veces pienso: la gente que trabaja en los medios, cuando los valores para mantener a la sociedad consumista, se decían católicos y cristianos, se dejen utilizar como mascotas y ahora se digan pro ideologías de genero y neo feminismo y ataquen lo que antes, supuestamente era su creencia de corazón, y con lo que movían a los creyentes para que consumieran sus programas y mercancías. Los medios son el cuarto poder político. Son el poder aplastante y abrumador de la calumnia. Por eso te decía el otro día, para llegar a ellos, a los de arriba, tendrías que tener un poder tan grande como la masividad de los medios: cine, tv, comerciales, series, canciones ,artistas, premios nobel, ONU, OMS, todo un mundo mediático para poder contrarrestar al ejercito de sus medios. Mientras no tengas ese poder o sepas como burlarlo, no puedes aspirar no ser aplanado.
@@zhareet Desde Akhenaton en el antiguo Egipto, hasta William Hearst y más allá, ha quedado en claro que el más poderoso, siempre, es el que escribe (o reescribe) la historia. Actualmente tenemos a empresarios escribiendo la historia a cada momento según convenga para venderla "al por mayor". Efectivamente, si mañana les conviene a los medios vender el ©anibalism∅ como valor contemporáneo, lo harán. Bueno... metafóricamente ya lo hacen.
Versión modificada para intentar subirlo:
El artículo del periódico había sido claro: "ellos" se habían filtrado entre la sociedad a través de huéspedes: los mismos humanos. La manera rápida de gobernar, la de destruir, pues su llegada significaba el fin de todo lo que era conocido actualmente.
Carlos miró a su esposa, sabiendo que si ella leía el artículo se daría cuenta de que él lo sabía. La mujer era astuta y sabía esconder secretos. ¿De verdad ella pensaba que no se había percatado? ¿Que las cosas en su matrimonio no habían cambiado? Sí, era obvio que lo notaba, pero mantenía la fachada de tranquilidad.
-¿Pasa algo, cariño? -le preguntó su mujer al notar cómo Carlos la observaba.
-No.
-Te ves pálido -señaló ella. Carlos notaba la falsedad en su voz. ¿De verdad creía que no se daba cuenta?
-Saldré a tomar aire -. El hombre se dedicó a dar vueltas por la casa pensando cómo proceder. No podía dejar las cosas así. Tomando el machete entró a la cocina encontrando a su esposa con el periódico. Se vieron a los ojos y ella se levantó, tomando el cuchillo.
-Sé que lo sabes. Tú...
Pero Carlos no le dio tiempo de terminar. Se fue contra ella y la degolló con el machete, salpicando de sangre piso y paredes.
-Mantenías la fachada para que yo no me diera cuenta de que lo sabías. Lo siento, cariño, pero nadie más debe saber que no soy Carlos.
El falso Carlos ya cree la batalla ganada; no sabe que ahora tendrá que enfrentarse a las feministas y a los medios de comunicación.
@@Sunnako jajaja. Has pensando en que "ellos" manejan todo eso? Me hubiera gustado subir el texto original, pero YT no me dejó. Intenté subirlo después del que modifiqué y me lo tiró de nuevo. Supongo que puse cosas que no le gustaron, jaja.
@@itzelbriseno6615 A lo mejor "ellos" ya están infiltrados en youtube y no quieren que reveles más de la cuenta 😨
@@Sunnako Exacto. No sabemos si nos leen o nos miran justo ahora 🧐
@@itzelbriseno6615 CZcams te está vigilando. 👀
El hermano menor dejó escapar treinta años de tensión en un bostezo, y se llevó las manos al rostro, como para contenerlo, o cubrirlo. Después se puso a reflexionar, y sus ojos café, que increíblemente todavía conservaban la dulzura y aquella serena tristeza de la niñez, vagaron con pena sobre el montón de diarios viejos que se apilaban frente a él. Cuando lloró no lo hiso por la muerte de su hermana, se había adecuado a su ausencia hacia ya largo tiempo. Sus lagrimas hacían honor a la impotencia del engaño, al ya irrecuperable tiempo perdido. “Quisiera haberlo sabido antes” se dijo para si. El nombre de su hermana estaba ahora finalmente limpio, es cierto… pero, para ser sincero, ¿que importancia tenia después de mas de dos décadas? Este pensamiento, no obstante, se desintegró con premura ante la certeza ineludible de la liberación. El nudo del prejuicio acababa de desatarse en su interior, convirtiéndose en un puente que lo llevaba hasta ella. "Te quiero”, le susurro al silencio, y en la quietud, la Verdad purificó su corazón.
Cual esa pluma que enamorada del espacio, se suelta por disfrute, de su gorrión en vuelo... Así llegó hasta mí, aquél papiro... Y si bien el común de los mortales, desgarraría sus vestiduras por señalar que tan solo era un papelito descartado desde los pisos altos de algún edificio. ¡Para mí era un mensaje! La textura rugosa... Su tamaño insignificante... Lo ilegible de sus glifos... Eran detalles demasiado místicos como para pertenecer a una basurilla. Era evidente que ¡Alguien o algo quería hablarme! Y en ese momento (hace 2 horas), no se me hacía difícil, el suponer un Ser, que imposibilitado en su naturaleza Divina del trato carnal. Idease la manera de ofrendarme su sapiencia a través de un misterio que hecho de pasta de celulosa y arrojado sobre mi espacio personal... Me otorgaría los indicios para que Yo y nadie más que Yo, pudiese descifrarlo... Hace minutos, traté de asociar sus borroneados trazos a las estructuras de escritos rongo rongo, hallados en la isla de Pascua... Pero hace segundos, obtuve mejores resultados al superponerlo sobre las cavidades cuneiformes de antiguos escritos sumerios... Y ahora en este instante, después de infinitas y sufridas combinaciones... Mal o bien pude obtener el siguiente resultado: " Hay días en los que aunque ames escribir... No se te va a ocurrir como finalizar un relato de manera original... "
Como siempre interesante este video. Me recordaste a la canción de Juan Gabriel que dice algo así: "Te voy a Cambiar el Nombre pero no cambio la historia, para guardar el secreto. Te llames como te llames para mí tú eres - La Gloria -". Es muy interesante y también importante tomar estas recomendaciones. Puede pasar que nos sentimos con el derecho de escribir todo lo que nos pasó y no tomamos en cuenta los sentimientos de los demás cuando lean las cosas o que se ofendan si contamos confidencias. También puede pasar que contemos cosas que quizás los demás no quieran que se sepan. Como por ejemplo "Y yo quedé con mi amiga que según íbamos a la biblioteca a hacer la tarea, pero en realidad eso le dijimos a nuestros papás, para que cada una nos fuéramos al hotel con nuestros novios", por decir un ejemplo jejejejeje. Cualquier parecido con la realidad pura coincidencia.... o cosas que por ejemplo mujeres no quieren que se sepan como cirugías que se han hecho, o con quién perdieron la virginidad... o igual cosas que se ocultan o son confidencias entre hombres, como que en lugar horas extras se fueron con la amante... o casos que hasta han salido en noticias, como que mientras la esposa trabaja, el marido también se acostaba con su hermano por decir algunas cosas que pueden causar problemas. Me gusta la recomendación de que se pueden contar estas cosas pero igual también se pueden disfrazar cambiando nombres, cambiando lugares, etc. Dicen que la realidad a veces supera la ficción. ¿Quién sabe en cuántas novelas han contado cosas que sí sucedieron de verdad?
Hoy se me complicó el día y ahora es que vine a terminar de escribir el reto (son casi las 2:00 am). Mañana temprano me pondré a leer y comentar los demás. :)
Traté de publicarlo y dio error, seguro por lo extenso. A ver si funciona dividido en partes.
Reto 19:
(Parte 1 de 2)
La señora Antonia continuó arrojando migajas de pan duro a las palomas del parque, a pesar de que ya veía venir a un vigilante. La sociedad podía transformarse, podía inventarse cuantas regulaciones le viniera en gana y justificarlas con argumentos coherentes, pero nada de eso le importaba un rábano a la anciana: mientras el parque tuviera animalitos, ella seguiría alimentándolos.
-Siempre que la salud me lo permita -dijo, pensando en voz alta.
-¡Fuera! ¡A volar! -gritó Andrés, el vigilante, y apuró el paso con los brazos extendidos, forzando a huir a los pájaros en un completo desorden. Luego miró a la anciana, moviendo la cabeza en gesto de desaprobación mientras algunas plumas caían suavemente aquí y allá.
-Buenos días, Andrés. ¿Alguna razón por la que andas espantando a mis amigas?
-Señora, ¿cuántas veces tengo que repetirle que está prohibido alimentar a las palomas?
-¿Prohibido? ¿Pero por qué? ¿Desde cuándo? ¿Y dices que me lo has repetido varias veces? Es que a mi edad la memoria ya no es como era antes.
-A mí no me engaña. En toda mi vida no he conocido una memoria más peligrosa que la suya, si usted se sabe hasta la fecha de nacimiento de todas las almas que frecuentan el parque, todos los secretos, todos los chismes, eso sí que no se le olvida.
-Ay, Andrés, qué exagerado eres. Y pues sí, mi memoria es selectiva con los mandatos de los necios. ¡Prohibir alimentar a las criaturas de la naturaleza! Son sólo migajas de pan, ¿qué daño pueden hacerle a nadie?
-Yo sólo cumplo con mi deber, si usted anda arrojando pan, y yo me hago el que no ha visto nada, después viene el supervisor y soy yo el que termina escuchando el sermón: que si las palomas contagian enfermedades, que si el pan atrae ratas y cucarachas, que si esto y que si lo otro. Bah.
El teléfono de Antonia hizo un breve zumbido y ella lo sacó de su cartera para revisarlo.
-Dame un segundo, me ha llegado un mensaje.
La anciana siempre explicaba el significado de cada sonido que hacía su teléfono, como si nadie más pudiera ser capaz de adivinarlo. Vio que el mensaje venía de su vecina, la veterinaria Flora; se lo hizo saber a Andrés como si él y Flora se conocieran. Luego leyó:
«Mi muy sentido pésame, doña Antonia, lamento muchísimo su pérdida. La acompaño en su dolor en tan difícil momento.» El mensaje concluía con tres emojis repetidos de una carita con lágrimas.
Antonia reaccionó fijando la mirada en el mensaje, que se le hizo borroso; sus manos afectadas de artritis buscaron, como de forma automática, el botón de encendido y lo presionaron hasta que en la pantalla aparecieron las opciones para apagar y reiniciar. Apagó el teléfono sin leer las palabras del menú.
-¿Malas noticias? -preguntó Andrés.
-La vecina dándome el pésame -Antonia tenía la mirada fija en la pantalla negra.
-Oh, lo siento mucho, señora. No sabía que había fallecido un familiar suyo.
La anciana pareció salir de un trance, miró al vigilante a los ojos y dijo en voz baja.
-Yo tampoco.
(Parte 2 de 2)
Hacía unos treinta años, el parque había sido dividido en dos mitades iguales. Las protestas, que contaron con el apoyo de algunas celebridades locales, no lograron evitar que en una de estas mitades se edificara un enorme centro comercial. El monumento al consumismo y el santuario de la naturaleza convivían desde entonces como hermanos muy dispares. Quienes frecuentaban el parque detestaban a los consumidores que venían del centro comercial cargados de bolsas, y que ocupaban los bancos y dejaban basura por todos lados. Quienes frecuentaban el centro comercial detestaban a los deportistas del parque, que llegaban todos sudorosos y malolientes a refrescarse en el potente aire acondicionado. Los ancianos estaban a gusto en ambos ecosistemas y pasaban de uno a otro sin ser percibidos, también tenían la capacidad de pasarse el día entero criticando tanto a los consumidores como a los deportistas.
La señora Antonia caminaba pensativa, mirando las vitrinas. El vigilante Andrés había ofrecido buscarle un taxi al enterarse de las malas noticias, pero la anciana prefirió despejar la mente con un paseo por el centro comercial, tras lo cual planeaba irse caminando hasta su casa, que estaba cerca de allí.
Antonia mantenía el teléfono apagado, no estaba preparada emocionalmente para recibir otros mensajes o, peor aún, para tener que atender una llamada; pensaba que mientras no supiera quién había muerto, era como si esa persona todavía viviera, y deseaba extender ese lapso de piadosa ignorancia el mayor tiempo posible. Debía tratarse de alguien muy cercano. Como inmigrantes, ni Antonia ni su marido, el señor Lorenzo, tenían familiares en el continente. Las dos hermanas de Lorenzo habían muerto años atrás, y él no había visto a sus sobrinos y sobrinas más que un par de veces en toda su vida. En el caso improbable de que Flora, la veterinaria, se hubiera enterado de la muerte de alguno de esos familiares lejanos, dudosamente le habría escrito a Antonia un mensaje tan emotivo como el que le envió. Antonia, por su parte, no tenía familiares vivos en el viejo mundo; su único hermano había muerto muy joven, sin dejar descendencia; en cuanto a sus padres, tíos y tías, primos y primas, hacía tiempo que todos criaban malvas.
Doña Antonia y don Lorenzo tenían un hijo, Georgio, y una hija, Paula. Georgio estaba divorciado y tenía dos hijas adolescentes. Paula tenía una novia con la que deseaba casarse y adoptar un bebé, pero se lo impedía la penosa circunstancia de que en el país no se reconocían tales derechos. Perder a cualquiera de estos seres queridos iba a ser un golpe demasiado duro para Antonia, eso lo sabía bien.
Su marido era su principal punto de apoyo emocional, la vida sin él sería muy difícil, y sin embargo, en el fondo, esperaba que si le había llegado la hora a alguien en su familia, hubiera sido a él; al menos Lorenzo había tenido una larga vida, llena de toda clase de experiencias; no dejaría muchos sueños incumplidos ni asuntos pendientes de mayor importancia.
Antonia entró en la sección de puestos de comida rápida. Los establecimientos estaban alineados en un perímetro que enmarcaba un área circular con mesas y sillas coloridas. Aunque se vendía todo tipo de comida, un tentador aroma a papas fritas dominaba el ambiente. La zona central de mesas y sillas estaba delimitada por un muro de poca altura coronado por una valla de tubos amarillos y verdes. La zona contaba con cuatro entradas amplias, una en cada punto cardinal. Junto a una de estas entradas, había una carreta rústica donde vendían postres y una variada selección de café gourmet; era el puesto favorito de Lorenzo. Antonia ordenó un cappuccino. Tomó el primer sorbo con los ojos cerrados, imaginando que su marido estaba a su lado. ¡Cómo hubiera querido oír su voz en ese instante! Pensó que quizás él ya no vivía y experimentó una presión desagradable en el pecho.
Una o dos semanas después de la inauguración del centro comercial, hacía treinta años, Antonia fue a explorar las tiendas junto a sus hijos. Georgio y Paula tenían gustos similares: ambos querían conocer los arcades, de los que todos los niños habían estado hablando en el colegio, y también querían ver si había alguna tienda de deportes. En su recorrido pasaron junto a una tienda de instrumentos musicales y quisieron entrar a ver las guitarras. La empleada los atendió con dulzura y, con la aprobación de Antonia, le obsequió dulces a los niños.
-¿Y cómo se llaman ustedes? -les dijo.
-Yo me llamo Georgio.
-Y yo Paula.
-Harrison y McCartney -agregó Antonia sonriendo y poniendo orgullosamente las manos en los hombros de sus pequeños Beatles.
-¿Quiénes? -la empleada no entendió la referencia, para decepción de la entusiasta madre.
Antonia volvió al presente, con la mano puesta sobre la vitrina de lo que había sido la tienda de instrumentos; pocas tiendas habían perdurado desde aquellos días. Pensó en Georgio y Paula, sus pequeños escarabajitos. ¿Podría haber tenido un accidente fatal alguno de ellos? Antonia había escuchado decir que perder un hijo es uno de los dolores más profundos, y ahora que se enfrentaba a semejante posibilidad estaba convencida de que así era. Nuevamente dejó escapar sus pensamientos en voz alta:
-Por favor, no mis escarabajitos.
Y luego estaban sus nietas, Antonia apartó el pensamiento de inmediato. No se permitiría considerar una perspectiva tan cruel. Consideró que lo mejor sería volver a casa a ver con qué se encontraba. Si no había nadie, sería allí, y en ningún otro lugar, donde podría reunir el valor suficiente como para encender el teléfono y afrontar los hechos.
Anochecía, y los faros de la calle ya alumbraban las aceras de la ciudad, atrayendo a cientos de polillas. Todo lucía sombrío y gris, todo sonaba aletargado, la atmósfera pesaba más de lo habitual. La señora Antonia andaba abatida, alargando los pasos, retrasando el desenlace tan temido.
Cuando estuvo a pocos metros de la entrada de su edificio, escuchó que la llamaban, había estado tan concentrada en sus reflexiones que tardó en caer en cuenta de lo que ocurría.
-¡Tonina!
Era su marido. Antonia corrió a abrazarlo y luego ya no quiso soltarlo.
-Tonina, me estás asfixiando. ¿Dónde te habías metido? ¡Te llamé cientos de veces y no caían las llamadas! Ya iba saliendo hacia el parque a preguntar si te habían visto.
Antonia lo explicó todo.
-¡Tonina! ¡Era el juego! -dijo el anciano y sacó su teléfono.
Flora, la vecina, le había enviado el mismo mensaje a Lorenzo, pero con una diferencia, decía así:
«¡Tres a cero! ¿Vio el partido? ¡No entiendo cómo puede seguir a un equipo tan malo! Jajaja.
«Mi muy sentido pésame, don Lorenzo, lamento muchísimo su pérdida. Lo acompaño en su dolor en tan difícil momento.»
Concluyeron que tras enviarle el mensaje a Lorenzo, la vecina lo había copiado para mandárselo a Antonia, pero tras cambiar algunos detalles, debía haber borrado el primer párrafo por error. O quizás lo había copiado incompleto. Y eso no era todo: lo que Antonia había creído que era un emoji con lágrimas de tristeza, no era sino el infame «cara con lágrimas de alegría».
-Entonces era el juego -dijo Antonia aliviada y sin poder creerlo.
-¡Era el juego!
-¡Y perdimos!
-¡Sí, perdimos!
Y los felices ancianos gritaron y bailaron de alegría en medio de la calle, celebrando la derrota de su equipo.
RETO 19: USAR TU VIDA (Y LA DE OTROS)
-Otevřít dveře!, Open the door! ¡Abre la puerta! -gritó el checo que conocí en Instagram-.
No debo decir nada. Lo peor de todo es que vino con sus compañeros. Como me lo esperaba, son más altos y fuertes que yo. ¿Cómo supieron dónde vivo? ¿Acaso uno de ellos es ingeniero de sistemas? ¿O fueron mis compañeros de colegio?
-I saw the ligths and your shape. También sé que estás solo. Más vale que abras o iremos por ti -dijo el rubio enrojecido por la ira-. Puedo ver que es posible entrar por el techo del primer piso al tercero.
¡Maldita sea! ¿Qué hago? ¿Cómo es qué se enteró? ¿Acaso su jefe le dijo de la novela que escribí? ¿Le gusta el terror cómo a mí? ¿Ya sabe cómo son los uniformes de mi colegio?
-Ok -dije muy levemente-. Forgive me, mis… -Me interumpí al acordarme que el sabía hablar español-. Señor Elu.. -deje de hablar al escuchar ruido desde el tercer piso-.
Con el cuerpo tembloroso, vi por la ventana de mi cuarto que ninguno de los chicos estaba allí, pero vi una nota que decía “Preparate”. Volví a meter mi cuerpo en la oscuridad de mi cuarto y recé para que nada malo sucediera, pero me detuve cuando escuché una puerta abriendo y luego que alguien tocaba a mi puerta.
-Abre la Puerta, Bruno. Debemos hablar.
CZcams se levantó de mal carácter otra vez y no me deja publicar. Bah!
Edit: después de mutilar un poco el texto sí me dejó.
Espero que no le haya dolido mucho al escrito.
@@zhareet Aún guardo el original en la pc y en la nube, así que no dolió ni un poco. El de aquí podría ser la versión demo 😉
@@Sunnako La versión para niños. Jaja
@@zhareet Vivieron felices y comieron perdices.
@@Sunnako😂😂
Esto me recuerda a Horizonte Final, cuando la versión original del mensaje "libera te met ex inferis" resulta ser "libera te tutemet ex inferis" 😨😨😱😱😱
El joven Dormuth hojeó las cartas que guardaba Sara y en ellas no encontró nada raro, salvo una pequeña nota que decía "En la fiesta de la cosecha, cerca de medianoche montaré el señuelo de un cadáver, es una joven idéntica a ti, pensarán que has muerto y podremos irnos juntos, trae el vestido color jazmín y tu cepillo con espejo para dejarlo ensangrentado, siempre tuyo. Leroyd."
Como por arte de magia, el rostro jovial de Dormuth pareció envejecer treinta años tras darse cuenta de que todos estos meses no estuvo llorando por Sara, sino por un alma impostora producto del engaño.
Era el día de la boda ella no podía estar más aburrida, el matrimonio era por conveniencia, su familia había pasado por malos tiempos y al parecer la Unión de con la familia Veinen los salvaría, Richard Veinen era un tipo elegante y bastante apuesto, serio y lo bastante rico para que su madrastra quisiera casarla con el. Ninguno sentía particular interés por el otro, para ella el era dinero y para el ella eran relaciones sociales. Inna era la tercera hija, sus dos hermanos mayores William Railet y Sack Railet, eran por mucho importantes en la gran ciudad, y apesar de que eran muy unidos cuando habían cumplido la mayoría de edad se marcharon dejándole con la ilusión que un día volverían por ella. Primero su libertad arrebatada por su género, y ahora por dinero. Inna se alzó del banquillo y camino asía la puerta una carta estaba en el piso. Ella se agachó y la tomó entre sus dedos, el sello pertenecía al de la casa de su futuro marido. Rompió el sombrero y saco unos papeles. Leyó cuidadosamente y una vez terminados se dejó caer al suelo. Aquel papel redactaba un testamento, ella parecía ser una hija no legitima de su padre, su madre había guardado el secreto para evitar las vergüenzas, pero al parecer en el viaje de sus dos queridos hermanos habían conocido a su verdadera madre quien al casarse con un conde había obtenido una respetable vida, su verdadera madre se negaba a reconocer la en pública y por ello pagaba una generosa cantidad para guardar el secreto, aceptando el dinero solo dejaron que una persona más se enterara el señor Veinen, así el había cancelado el matrimonio. Abrió otra carta esta con sello de los Railet, sus hermanos le escribían consolando la temporada ofreciéndole ir con ellos, donde tendría su protección y discreción que ellos mismos habían omitido a favor de romper el matrimonio que a ella le desagradable. Presionó las cartas contra su pecho. Hoy el día de su supuesta boda, había sido una prueba de amor, no de aquel con quien se iba a casar, no de sus padres si no de quien pensaba que se habían olvidado ella cuando en verdad siempre habían Estado atentos por ellas, sus queridos hermanos.
Me encante Escritubre, me has ayudado con muchas de las dudas que me volaban en la cabeza. Ahora es momento de ponerlo en práctica, gracias por todo tu esfuerzo. Saluditos ♥️✨
Hola. Hablando de escribir la vida de otras personas: que te parece lo de Carmen Mola.
A mí me dio muchísima risa. 😂
La reveladora identidad de "Carmen" 👍 una sorpresa !!
Me senté en frente del Mursi, tenía un mal presentimiento, pero debía de saber la verdad.
Me ofreció un poco de tequila, el ya sabe que yo no tomo, pero no le importo, me hizo beberlo de todas formas, al tomarlo sentí como el alcohol de deslizaba por mi garganta y me la lastimaba, fue horrible, pero por la mirada sería del Mursi sabía que lo que estaba a punto de enseñarle era peor.
Tomé la carpeta de piel, había anotaciones por todos lados, el vagabundo no solo logro decifrar el contenido de los documentos, si no que también me escribió pequeñas notas al respecto.
"Te utilizo" me dijo. "Solo fuiste una herramienta para que el puedes obtener los datos necesarios del lugar".
Sabía que era mentira, el era mi amigo, casi como un hermano para mí, pero los papeles no mentían, el desgraciado de verdad me utilizo, nos utilizo, pero aún así confronte al Mursi.
"No es cierto, el no haría algo como así, es mi amigo". Y acto estudio me fui de la cantina, debía de encontrarlo y hacer qué me explicará las cosas
Justo mi nueva novela va por ese camino más o menos
Julián palideció al leer el informe ginecológico de su madre, no porque el diagnóstico fuera maligno, sino por los antecedentes.
"Menarquia: a los doce años"
"Embarazos o abortos: ninguno"
Gracias, CZcams 🙄 me borra mi reto. Intentaré subirlo más tarde...
A mi ya me ha pasado dos veces, es desesperante 😥
Uf, no soy yo, lo juro.
A mí también me acaba de pasar y lo había escrito en la respuesta pública, así que era el original.
Es porque la caja de comentarios no está preparada para otra cosa que respuestas breves. Puede que tenga un máximo de caracteres, que no soporte muchas mayúsculas, o signos de exclamación, comillas, etc. Pueden ser muchas cosas. Yo últimamente escribo el texto primero en una página de texto DOCX sin justificarlo y sin cambiar tipo de letra ni nada, tal cual sale predeterminado cuando abres una página nueva, y luego lo cortapego a la caja de comentarios. Desde que lo estoy haciendo así ya no me rechaza ninguno. De momento...
@@seaexpert
Muchas gracias por tu recomendación, así lo haré a partir de ahora.
Vídeollamadas entre María desde Canarias y su amigo José que vive en Madrid
José: Se me acaban de caer los platos del fregadero.
María: ¡Que susto! ¿hay fantasmas?
José: Siempre me han dicho que podía tenerlos. Me voy a ir de este piso en cuanto pueda.
María: Lo siento, encima que te subieron el alquiler. Cambiando de tema ¿qué tal por Barcelona?
José: Ayer no se podía andar por la calle por las fiestas.
María: ¿Puedo hacer una pregunta estúpida?
José: Claro.
María: ¿Es tétrico el metro?
José: En Madrid recuerdo una estación fantasma, donde no paraba el metro. Una estación sin luz ni gente. Pasabas por hay y era bastante tétrico ver una estación abandonada.
María: Todo lo que sean túneles y pasadizos siempre se imagina uno que
existe algo.
José: ¿De verdad crees qué es sólo imaginación?
Al día siguiente
María: Anoche tuve unas pesadillas terribles.
José: ¿Qué soñaste?
María: No me acuerdo. Pero desperté con escalofríos y ganas de gritar.
José: ¡Qué horror!
El chico colgó la videollamada sin más. Sin embargo María debía lidiar con las pesadillas, probablemente causas por lo que le cuenta su amigo sobre fantasmas y lugares tétricos. Un mes después José recibe un envío a domicilio. Al abrirlo, se trata de un libro : El mundo subterráneo. Autora: María Torres. José lo ojea con atención y en la última página leyó : Gracias por inspirarme.
Bien por María, escribir es una buena forma de canalizar las pesadillas. :)
@@krugos1978 gracias. Pensé que encajaba bien con el tema del reto de usar tu vida como punto de partida para escribir. Este caso no es tanto la pesadilla sino lo que le cuente el amigo y luego ella tiene pesadillas aparte. Que si te fijas bien María puede ser hasta una niña, por la pregunta del metro o al menos alguien ingenuo para su edad.
El cielo cayó mientras nos besábamos, y algo turbulento nos recorrió los cuerpos hasta llegar a una electricidad al final del beso, el único y más intenso que tuve en mi vida.
Cinco segundos después, el avión chocó con una torre de la ciudad.
Sara no entendia porque a las demas mujeres les gustaban los hombres. Ella no queria tener novio. No sentia atraccion por ningun joven. No le gustaban fisicamente y tampoco le agradaban sus habitos. No le disgustaban pero no concebia como las mujeres siendo mas bonitas que los hombres sintieran deseo por tener un compañero masculino por el resto de sus vidas. Ella se preguntaba ¿Si la atraccion se da por criterio estetico como puede ser posible que las demas mujeres no sean lesbianas por naturaleza?
Le parecia natural que los hombres quisieran salir con mujeres pero no alreves. Perdio la virginidad con su vecina. Eran novias a escondidas. Sus padres se dieron cuenta y la llevaron con el psicologo. El especialista en salud mental les decia que no era una enfermedad pero que posiblemente algun elemento en la construccion de su personalidad influia en que ella fuera diferente a las demas mujeres.
Un dia salio con un hombre guapo. Le parecia que era bonito. Decidio tener un encuentro intimo con el. No le disgusto pero no le agrado de la misma manera que las relaciones intimas con su ex-novia. Ademas penso que algun dia ese joven creceria y los pocos rasgos delicados de su rostro desaparecerian. Estaba decidida a no casarse con ningun hombre. Ni siquiera pensaba en atreverse en tener un novio.
Fue a la universidad en la capital del pais y tuvo una novia. Nunca le dijo a sus familiares. Un año despues de que se graduo se entero de que se habian autorizado los matrimonios entre personas del mismo sexo. Era la oportunidad de su vida. Ella y su novia visitaron a su familia y les hicieron saber que se iban a casar. Sus madre y su padre se asustaron pero lo aceptaron. Le dijeron que sabian que debia de tener alguna novia estando lejos de ellos. Sara habia encontrado la felicidad. No podia creer que por fin existiera un mundo en el que sus sueños se hicieran realidad.
Reto 19.
Usar tu vida.
Después de clases, Laura y Adam siempre regresaban juntos a casa, pero no sin antes atravesar el viejo y frondoso parque que tanto les gustaba recorrer: Los dulces canticos de las aves silvestres, el murmullo del viento rosando la copa de los árboles y el andar de algunas ardillas traviesas que se dejaban ver, eran de las cosas por las que tanto les gustaba ese lugar. Después de un buen rato andando, los chicos llegaban hasta un viejo canal; donde había varios patos nadando cómodamente, ambos se sentaban lado a lado sobre una banca metálica, mientras comenzaban a contemplar el entorno en silencio, el clima era perfecto. Laura posaba su cabeza sobre el hombro de Adam y decía.
-Sabes… Tú eres como mi parque tranquilizador en mi vida. No importa a donde vayamos o en donde estemos, cuando estoy a tu lado, es como si estuviera aquí.
"Preferí guardar silencio y disfrutar cada instante contigo, a decirte que tenía un mal incurable, sin embargo, no se puede tapar el sol con una mano."
-¿Últimas palabras?
-Por favor, no lo hagan. Me disculparé, no lo volveré a hacer. Perdónenme.
-Nada original. Ni siquiera en tus últimos momentos puedes decir algo tuyo.
-Por favor, por favor, ténganme piedad. No sabía que la cosa iba a terminar así.
-¿Que no lo sabías? ¿Y qué pensabas cuando escribiste sobre mi aventura amorosa? ¿Qué pensabas cuando escribiste sobre Laura y sus robos? ¿Y sobre Pedro y la otra familia que tiene?
-No creí que la gente se iba a enterar que eran ustedes.
-¡Ja! No nos salgas con eso. Si pusiste nuestros nombres, si pusiste toda la información necesaria para que la gente supiera que hablaras sobre nosotros.
-Lo puedo arreglar, lo juro. Me pidieron un segundo libro, ahí puedo arreglarlo.
-¡Suficiente! Ya no confiaremos en ti. Agárrenlo que yo lo mato.
Hola, Lorena. Un gran saludo. Ya que mencionas este tema, quisiera preguntar si para una autobiografía cambian las cosas, ¿a qué me refiero?, mira, yo sufrí Bullying universitario y fue una experiencia muy dura. Hoy lo que más desearía es desprestigiar a esos compañeros, decirle al mundo la clase de calañas, la clase de basura humana que en realidad son, por lo que mi gran deseo sería, en un escrito autobiográfico, exponerlos; decir todo lo que me hicieron. Así, quisiera preguntar si puedo dar nombres. Ahora bien, si no me acuerdo de sus apellidos poner, por ejemplo, Ana 'n', pero sí mencionar la generación, la universidad, para que quede lo más cercano a lo que pasó. Yo sería la más feliz si, debido a las descripciones, hubiese quienes los pudiesen identificar. Más allá de temas de difamación, ¿habría otras razones de peso para no dar nombres o lugares?, es que, de verdad, quisiera poder exponerlos al mundo como las lacras sociales que son. Una disculpa por lo emocional que me puse, pero lo traigo atorado.
Si te sirve mi comentario, yo leí un libro autobiográfico y lo que hizo la autora fue usar pseudónimos con algunas personas sobre todo aquellas con las que sufrió algún tipo de violencia y desacreditación, y eran personas de su propia familia. Es algo que puedes intentar hacer, aunque claro, es tu decisión. Podrías echarle un vistazo para que tengas una idea. El libro es: "Una educación" de Tara Westover.
Como lo pintas, suena a venganza tímida, y las venganzas son siempre algo personal e infructuoso. No esperes que el pueblo se sume para abuchearlos.
@@Sunnako eso es cierto, pero escribirlo puede ayudarle a sacarlo, aunque no haga nada con ese texto después. Jeje.
@@itzelbriseno6615 Por supuesto. Mi mensaje anterior sonó algo cortante quizás. Yo solo sé que personalmente no escribiría un libro con el propósito de denunciar gente esperando una reacción contra ellos, si entendí bien la idea. Pero cada libro que se comienza es una apuesta y algo personal, así que ya mismo puede comenzar a escribir sin culpa. Por problemas legales no creo que deba preocuparse.
Puedes decidir denunciar y en ese caso es un testimonio y no una novela. Como con cualquier mensaje que queremos dar, hay que pensar qué quieres obtener de él y ajustar tus expectativas.
Bueno. otra vez no me permite subirlo, asi que lo volvere a intentar como respuesta aqui.
Jaja lo que me obliga hacer CZcams. parece que funciono (Segun yo) pero tuve que cortar el fragmento en pequeñas partes. y en la 3 parte me obligo a usar numeros en algunas palabras. Lo comento por si acaso a alguien tambien le puede funcionar.
Parte 1
Paul: el gran científico quien trajo una vida llena de juventud y eternidad, proclamado por algunos como un Dios.
Todo empezó con el deseo de volver el cuerpo fuerte y dejar que el ser humano dejara de enfermarse, y aunque también logro ello. No esperaba que funcionara y mucho menos que les diera la oportunidad de que los humanos vivieran por muchos años. Tal vez incluso para siempre
No fue un camino fácil: llevo mucho trabajo y esfuerzo, y lo que la gente que anhela cada dos meses no sabe... es que también requiere sacrificio en cada dosis.
La clave de una vida eterna después de todo: era a base de niños de cinco a doce años...
No es nada malo, la gente no lo sabe. Paul después de todo es alabado, es tratado como el mismo Jehová, es famoso y exageradamente rico. Nadie podría dudar que... en realidad debajo de la tierra tenia un laboratorio donde escondía no solo a los niños. También a las niñas que permitió crecer para generar aun mas niños. Dado que desde que los gobernantes declararon esa ley. hacían su trabajo mucho más complicado.
Parte 2
Derrick: Uno de los policías encargados de que nadie rompa la ley que los gobernantes dejaron muy en claro hace muchos años. Tenía sentido, aunque Derrick también se viera obligado a… ¿Qué era mejor? ¿Arrestar o matar? Muchos de los que ha tratado prefieren lo último ante tanto dolor, que se vuelan la cabeza. No sin antes insultar a Derrick. Era un detective después de todo, y era su deber asegurar que en ningún lugar hubiera ningún niño aquí. La población ya era demasiado grande, seguir trayendo vida a un lugar lleno de inmortales. Sería como un vaso ya al tope de agua, echarle más se volvería desastroso. Sobrepoblación.
Al menos tenía la consideración de sacar a los padres antes de que él mismo mirara a los niños a los ojos. Y presionara el gatillo sin vacilar. Sin palabras. Solo era… un trabajo.
No es como si los padres apreciaran el gesto. Era claro que había pasado cuando el llanto del niño no se escuchaba. Cuando la bala siendo arrojada resonaba… y la bolsa negra salía de un tamaño pequeño… Si… a veces era inevitable que el sujeto se suicidara, pero muy pocos lo lograban. El deber de Derrick: era castigar a los criminales, sobre todo, en la ley más importante de todas. Y los gobernantes no querían una muerte rápida y piadosa.
Parte 3
Mercy: Una mujer que lleva mucho tiempo convida… y que comenzó a aburrirse de la misma rutina, sin que nada emocionante pasara… le faltaba algo. Creyó que al escuchar que sería joven y bella por siempre la alegraría, pero lo que comenzó como un hermoso regalo: comenzaba a sentirse como una maldición, aun mas, cuando esa maldit4 ley cayó encima. A todos lados que iba encontraba cada letrero recordando lo que ya sabe de memoria.
“Los niños no están p3rmitid0s”
No mucha gente le preocupaba quedar 3mbar4zad4. Una ventaja, como algunos lo llaman: es que la d0sis de la inmortalidad le impedía al cuerpo quedar en ese estado. Y nadie renunciaría a la vida eterna para traer un niñ0 que de ser descubierto sería 3j3cutad0.
Nadie más que Mercy.
Hace tiempo que se encontró anhelando ser madre. Viendo aquellos juguetes que ahora actuaban de mercancí4 de colección como recuerdos de infancia. Se encontró deseando amar a un ser pequeñito que la vería… como si fuera todo su mundo.
Esconder su 3mb4raz0 no fue fácil, pero por amor y esperanza, hiso lo imposible. Y valió la pena por ver la sonrisa de su hija de tres años al volver a casa. Un hogar que mantenía en medio del bosque para mantenerse oculta. Pase lo que pase: No dejaría que nadie descubriera a su pequeña. Daría su vida por ella.
Parte 4
Roger: Un adolescente que acababa de cumplir los diecinueve años. Uno de los niños capturados para extirpar no sé cuántos de sus órganos, y crear la dosis de la inmortalidad. Hace años escapo de ese maldito laboratorio subterráneo. Y hace años prometió que sería un justiciero para todos esos niños abandonados. Y ahora aquí estaba más que preparado. Tal vez fuera solo un hombre que ni siquiera pose vida eterna, pero tuvo mucho tiempo para practicar el manejo de las armas. Para poder adentrarse a cualquier sistema, y abrir cualquier puerta. Hace tiempo que perdió el miedo a quitar vida a los demás. Si era el precio a pagar por la libertad de los más pequeños que así sea, y comenzaría con hacer estallar ese maldito laboratorio. Después… mataría al Científico Paul porque mientras él sea asquerosamente rico, seguirá reconstruyendo el laboratorio y condenando más vidas. Pero por ahora. Lo importante.
Casi a media tarde. Paul recibió la noticia de que su laboratorio había estallado, y que había perdido a todos los niños. No fueron quemados. No murieron en la desgracia: Fueron sacados. Todos y cada uno de ellos logro escapar, liberados por un joven encapuchado y vestido de negro de pies a cabeza. Pero, a pesar de que mato a muchos de sus científicos, que sus hombres capacitados para matar fueron derrotados por este joven: Paul encontraría al responsable de arruinar su fama y su marca de Dios.
Roger por su parte, tenía que darse prisa. Si el libro de Sebastián estaba basando la vida de su personaje en su vecina… entonces tenía que ayudarla. Antes de que el famoso detective Derrick también cayera en las pistas del libro y diera con la vida de un inocente.
Derrick, por su parte, ya llevaba una semana leyendo e investigado sobre el libro de Sebastián. Un libro de género de terror que era muy bueno, pero no era el caso. Sospechaba que uno de los personajes estaba inspirado en su vecina Mercy. Y por lo que escribía, de que llegaba muy a la madrugada a casa, que parecía ocultar juguetes en su saco, y que traía en abundancia cada semana. Con el hecho de que casi no estaba en casa y se marchaba. pero no al trabajo. El propio Sebastián la describió como una mujer que probablemente tenga un niño escondido por los juguetes. Pero en el libro expresaba que como no había escuchado un llanto, probablemente lo tenga escondido en otro lugar.
Y era por eso que Derrick le puso un rastreador y luego llego a su hogar en medio de la nada, pero en el que claramente… se podía escuchar el llanto de una niña.
Mercy supo que era su fin cuando escucho esas palabras.
“¡Detective Derrick! ¡Abra la puerta o voy a derribarla!”
No es como si pudiera haber hecho algo. Ni siquiera tiempo para esconder a su amada hija, no es como si no fuera evidente cuando llevaba llorando en sus brazos ya hace tiempo.
Sea como fuera. El sonido de la puerta derribándose lleno el lugar, y al instante, el Detective se posó en la entrada de su cuarto con pistola en mano. Lo que hiso que Mercy bajara a la niña y la ocultara detrás suyo.
-¡No! ¡No! ¡Por favor! Se lo suplico… ¡Ella es toda mi vida! ¡No me quite eso! -Palabras histéricas llenas de desesperación, pero el Detective solo suspiro con frustración. No era su primer trabajo después de todo, que sacando la ley que estaba distribuida por todos lados, y que el Presidente no dejaba de recordar en cada canal. El Detective Derrick se la enseño a la mujer que seguía rogando inútilmente.
-Señorita Mercy. Hágame el favor de leer aquí. ¿Qué dice?
Mercy sabía lo que decía: Eran las palabras que odio en el momento en el que fueron escritas. La maldita ley que prohibía a los niños por sobrepoblación. Y el Detective Derrick sabía que lo tenía claro cuando dio otro suspiro pesado.
-No haga esto difícil. Tiene dos opciones: O se quita ahora mismo y me deja hacer mi trabajo. O tendré que dispararles a las dos. Usted decide.
Ninguna de esas opciones era aceptable. Que de la desesperación. Mercy ataco.
Parte 5
Roger se puso tenso al escuchar los disparos. Había seguido al Detective Derrick sospechando que ya sabía lo de Mercy, y fue así cuando lo llevo a una cabaña en medio del bosque, estaba muy escondido en realidad. Rezaba porque Mercy y su hijo estuvieran bien. Pero supo que no fue así cuando solo podía escuchar un llanto desgarrador dentro. Al menos eso le decía que el pequeño estaba bien… o lo más bien posible.
Tuvo su respuesta cuando al entrar a la casa y dirigirse hacia el llanto. Encontró dos cuerpos desangrándose en el suelo: El detective Derrick tenía el cuerpo lleno de balas, y lo que deducía que era Mercy una bala en el pecho. Justo en el corazón. Arriba de ella, había una pequeña niña que agitaba su cabeza y gritaba. “¡Ma! ¡ma! ¡ma!”
-Lo siento…-Fue todo lo que Roger pudo pedir, por haber llegado tarde para la pequeña, pero no había tiempo que perder. Nadie le aseguraba que Derrick hubiera pedido refuerzos antes de entrar aquí. Por lo que simplemente tomo a la niña que lloro con más fuerza. Obligándolo a taparle la boca con su mano, y arrullarla a la vez. -Sé que no lo parece, pero he venido a ayudar. Siento lo de tu madre. Pero te prometo que no estás sola. Voy a protegerte…
No pudo evitar mirar hacia abajo cuando algo crujió debajo de su bota. Que al ver: era esas malditas palabras que veía haya donde fuera.
“Prohibido los niños”
Cambiaría este mundo. Roger lo haría. Y empezara por quitar lo que todo el mundo desea. Esa maldita dosis que empezó con todo esto.
Gracias por leer.
Emma ía dunha estancia a outra da casa. Recolocaba un tapete do salón, corrixía a Felicitas sobre o peinado da nena, endereitaba o cadro coa escena de caza no bosque do comedor. Non lle daba pasado o tempo para abandonar ao marido e fuxir con Rodolfo esa noite ao asomar a lúa na flor das augas do río.
No cuarto do matrimonio abriu distraidamente o libro de anatomía que o Monsieur Bovary tiña na mesa de noite. Un sobre desprendeuse e caeu á alfombra. Emma examinou o sobre e a caligrafía éralle coñecida. Ela recibira moitas cartas con esa mesmo estilo de letra coidada e elegante nos últimos meses de paixón arrebataba. Tratábase dunha carta do seu Rodolfo que lle secuestrara a alma e era dono do seu corpo ao que tanto pracer lle daba pero a misiva ía dirixida...ao seu marido!
Rezaba:
"Querido meu, antes de que oscureza, ás seis como acordamos, pasarei polo camiño de atrás da túa casa co cabriolé. Ten preparadas os baúles. Non me chega a camisa a rozar a pel cos nervios e o desexo de poder abrazarte pola noite no hotel de Rouen e durante mil noites máis en lugares exóticos dos cinco continentes.
Teu sempre, Rodolfo."
Emma tremeu. Enfriou de modo súbito e desplomouse no chan como un fardel que cae nun almacén, como un amor traicionado que é arrastrado pola lama visguenta.
que arda troya
Y las ucronía….? Como entran en este tema….?
Pensé que habías escrito: y las ucranianas... Jaja.
PUTIN: ¿Alguien dijo "Ucrania"? , ( ͡° ͜ʖ ͡°)╭
@@Sunnako 😂
Ucrania: ¡¡Alguien dijo Putin!!
@@zhareet ONU: ¿Rusia y Ucrania? Eso no importa. Mejor podríamos sancionar a Nepal por la caza ilegal de cinco pollos montañeses colorados que tuvo lugar hace ocho años.
@@Sunnako Y luego, ¿Quién le venderá el gas a Europa para que deje de subir?
que arda troya