LOS SELLOS EN LAS PINTURAS DE TINTA (SUMI-E)

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  • čas přidán 13. 09. 2024
  • Los sellos en Japón son el equivalente a nuestra firma personal, aún se utilizan para firmar documentos y representan a la persona que los utiliza. Pueden estar hechos en pequeñas piezas de marfíl, de hueso, madera, jade, metal, aunque normalmente se utilizan piedras blandas, que son el soporte que permite un carvado manual del sello.
    Pero los sellos que nos interesan ahora son los que vemos en las pinturas y caligrafías de las pinturas de tinta. Estos sellos puede pertenecer a tres categorías: sellos de autor, sellos de expresión o sellos de coleccionista.
    Seguramente ya te habrás dado cuenta de que en algunos sellos el texto queda en rojo y en otros, por el contrario, en el color del papel. Los primeros están carvados para ser usados en “positivo” y los segundos “en negativo”. Ambos, como yin y yang conviven en una misma pintura como opuestos y complementarios. En mi caso personal en un mismo sello combino ambos, quizá para no olvidar esa concepción taoísta de la vida según la cual nada existe en estado puro ni en absoluta quietud.
    Las dudas más importantes que nos pueden surgir a la hora que poner nuestros sellos no son técnicas, sino de composición. Para eso nos ayudan los papelitos a los que nos referíamos antes, pero también (y sobretodo) una bien educada sensibilidad estética y el sentido de la composición. Ambas cualidades se irán mejorando con el paso del tiempo.
    Finalmente, una última confidencia: el sello es también la constatación de que una pintura está terminada. Ya se que parece una afirmación de perogrullo, pero lo cierto es que cuando pongo mi sello percibo que se rompe ese vínculo que me une con el proceso. Es una sensación de desprendimiento, como si en el instante mismo en que reafirmas tu autoría sobre ella, la obra dejara de pertenecerte. Y me gusta percibirlo así.

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